Mañana fresca la del domingo 13 de mayo que servía de
recibimiento a los muchos guerreros de la bicicleta de montaña que habían
venido hasta Alaraz para participar, un año más, en la Quedada BTT por este
paraíso natural.
Una edición más, y ya van siete, los organizadores habían
engalanado la plaza de la localidad salmantina para recibir con cariño a todos
los chicos y chicas que se habían desplazado desde diferentes lugares de la
región para formar parte activa de este evento socio-deportivo. El grueso del
pelotón venía de la provincia salmantina, pero también tuvimos visitantes que
llegaron desde otros puntos de la geografía española: Ávila, Canarias, Zamora,
Logroño, Cáceres, Aguilar de Campoo, Venta de Baños, Medina del Campo… ¡Un lujo de participación!
Como en años precedentes, conocidos y amigos pertrechados de
coloridas indumentarias se encontraban en Alaraz, todos con una buena dosis de
alegría y camaradería que bien se agradece en esta época en la que vivimos. Y
262 inscritos fueron los que este año tuvieron la fortuna de participar en la VII
edición de la Quedada BTT de Alaraz organizada por el Ayuntamiento de la
localidad en colaboración con el Ayuntamiento de Pascualcobo, la Asociación
Cultural Amigos de Alaraz, el Club Salandar y un buen número de empresas de la
zona.
El día fue perfecto para la práctica de la bicicleta todo
terreno: temperatura fresca, el sol jugando al escondite entre las nubes,
bellos paisajes en los que la Primavera está explotando en color, sonido, olor…
Dos recorridos, el corto y el largo, formaban parte de
nuestra prueba, como siempre no competitiva. Los participantes pudieron elegir
en función de sus posibilidades y en ambos disfrutaron de algunas pistas,
callejas, subidas y bajadas más o menos técnicas, pedregales, ríos… Todos
pudieron pedalear con energía, en algunos casos también tocó portear la
bicicleta durante algunos metros, atravesar zonas de barro, algún riachuelo,
etc. Y es que todos estos ingredientes son los permiten que nuestra quedada sea
única, diferente, intentando dar gusto a los corredores rápidos pero también a
los ciclistas que gozan con este tipo de terrenos más duros, exigentes, no
llanos, donde debemos sumar la técnica y la habilidad a nuestra fuerza y
resistencia, con la naturaleza como protagonista.
La prueba sigue creciendo con voluntarios, con divertidos recorridos
nuevos por el monte e inéditas callejas, más la inestimable colaboración del
ayuntamiento de Pascualcobo. Los nuevos recorridos han gustado a todos los
aficionados que se dieron cita en la Quedada y, después de cruzar impresiones
con un buen número de ellos, podemos decir que por lo general todo el mundo
estaba muy contento de haber participado por estos nuevos caminos, cuestas,
ríos, callejas, etc. del circuito.
Y no solo crece la prueba, también el nivel de los
participantes. Este año fueron 110 los que lograron subir la primera cuesta de la
zona de Las Radicales. El resto, se vieron doblegados por las empinadas rampas
de la primera Radical… Y es que la zona de las cuestas Radicales, no perdona… A
más de uno le tocó echar pie a tierra y sufrir a pie la inclinación de esta
terrible subida. Por cierto, ¡vaya ambiente extraordinario con la música en la
cima de las Radicales! Ya sabéis, a muchos os queda pendiente para intentarlo
el próximo año…
Como viene siendo tradición, el colofón a la jornada
matutina y deportiva lo puso un vino de honor que además nos permite charlar
con conocidos y amigos, comentar las subidas y bajadas, retar desde la
distancia a La Radical para el año que viene… Este año, además del sorteó de la
paletilla de jamón entre todos los corredores que fueron capaces de subir la
primera cuesta Radical encima de la bicicleta, también se sorteó una ‘bacalá’.
Desde la organización hacemos una valoración muy positiva de
toda la actividad, nos congratulamos por el éxito de esta modesta actividad que
se está convirtiendo en un clásico obligatorio para muchos deportistas, amantes
de la naturaleza, que eligen esta actividad BTT donde lo importante no es
correr sino disfrutar. Destacamos el buen ambiente y la extraordinaria participación
en esta ya séptima edición, agradecemos la visita de todos los ciclistas, los
acompañantes y el apoyo a todo el mundo (tanto a los trabajadores de la
institución alarazeña y de la vecina Pascualcobo, a los numerosos voluntarios
que trabajan antes, durante y después, a los sanitarios, a las fuerzas del
orden público, a Antonio Prieto por su material gráfico, a las casas comerciales, etc.). También nos alegramos mucho de
la participación de decenas de jóvenes y féminas que aguantaron como nadie la
dureza del recorrido y hacemos una mención especial a toda la chiquillería de
la Escuela Salmantina de Ciclismo, ¡qué valientes!
Brindamos un reconocimiento especial y cariñoso al casi
medio centenar de voluntarios y vecinos por su apoyo y comprensión, y a las
empresas que han colaborado con la quedada BTT y sin las que este tipo de
eventos, donde no hay clasificaciones, premios, regalos, etc., serían
imposibles de llevarse a cabo.
Queda demostrado que con ilusión y lo básico se puede organizar una bonita quedada, sin regalar camisetas, calcetines o revistas, sin grandes apoyos de casas publicitarias, sin conciertos, sin grandes escenarios... ¡Lo importante es un estupendo grupo humano ilusionado por su pueblo! Y ya estamos trabajando en la organización de la próxima
edición, ¡os esperamos en la octava!, aquí en Alaraz, en esta gran cita para
los amantes de la BTT, donde amigablemente seguiremos retando a todas esas
almas inquietas a disfrutar sufriendo y a sufrir disfrutando, eso sí, por este
paraíso natural.
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Para quitarse el sombrero, enhorabuena por la crónica, Lillo.
ResponderEliminarGracias, Rafa; el éxito se fragua con la colaboración de todos, que con los medios justos y mucho tesón sois capaces de hacer esta prueba bien grande.
Eliminar¡Vamos a por otra edición!